POR SU VIDA Y DIGNIDAD ¡EXIJAMOS LIBERTAD PARA MARCELA RODRIGUEZ !

LA PRIMERA SENTENCIA Marcela Rodríguez cayó herida en noviembre de 1990 en el rescate de Ariel Antonioletti. Una bala atravesó su médula espinal dejándola con una paraplejia espástica irreversible. Aislada en el hospital penitenciario por más de un año, fue privada de atención médica y de condiciones básicas de higiene corporal y ambiental por una decisión política que la prefería muerta. Profundas llagas en su cuerpo y cuadros infecciosos generalizados casi lograron tal propósito. Sólo la solidaridad y presión social nacional e internacional la salvó de ese trance y logró después su libertad provisional, pero no así su salida del país para que recibiera la atención integral que requería en ese momento crucial. Desde entonces y producto de las secuelas de su paraplejia, ha sido operada y atendida de urgencia reiteradas veces, sin que eso le haya significado mejoría alguna en su salud. Por el contrario, el aumento constante de dolores y espasmos que la mantienen en un círculo vicioso de sobrevivencia, a riesgo de su vida, es lo único que ha podido obtener de nuestro sistema de salud pública. Esto lo saben los médicos de los hospitales en los que ha estado y lo saben a la vez los Tribunales de Justicia, las Fiscalías y el Gobierno.EL DOBLE CASTIGO Actualmente Marcela está procesada por la II y IV Fiscalías Militares en base al Artículo 8º de la Ley de Control de Armas y Explosivos y la Ley Antiterrorista por el rescate de Ariel Antonioletti, con peticiones de condena en primera instancia de 20 y 15 años respectivamente. Todos estos procesos se han extendido por más de 8 años, pero al acercarse un cierre definitivo de estas causas, aumenta el riesgo de que la vuelvan a encarcelar. A raíz de esto y de otros vicios legales, está pendiente sobre ella una orden de arraigo que la sentencia a permanecer aquí, en su silla de ruedas y de hospital en hospital...UN CANTO A LA VIDA Estos años han sido el mayor y más duro desafío a sus convicciones y compromiso a toda prueba, a su amor profundo por la vida. Marcela resiste, lucha por mantenerse con toda su entereza y voluntad inquebrantable dando la pelea por la vida. Y la posibilidad de seguir soñando con una vida mejor por su pueblo. Desea estar mejor y ser respetada como persona, porque se lo ha ganado con creces y porque quiere seguir aportando a pesar de sus limitaciones. Su cuerpo dolido y cansado le pone trabas y le impide hacer lo que quiere entregar, pero no se da por vencida y, con fuerza y coraje, sigue luchando.NUESTRO DESAFIO Sólo un tratamiento integral puede romper ese círculo y salvar su vida. Una real estrategia de rehabilitación, con recursos adecuados y equipo interdisciplinario que avance armónicamente en todos los aspectos involucrados, con dedicación personalizada y sostenida en el tiempo. Las medidas de parche o parciales sólo han ocultado una lenta agonía. Hoy requiere de atención médica urgente, de calidad, eficiente y responsable; hoy su salud está más deteriorada. El sistema de salud en Chile, clasista y mercantilizado, le imposibilita acceder a un tratamiento adecuado. No hay bolsillo capaz de afrontar costos de tal envergadura. Por esta razón sólo queda la posibilidad de buscar este tratamiento en otro país. Convocamos a las organizaciones internacionales de solidaridad a obtener una invitación de una institución que se comprometa a acogerla y atenderla para brindarle los tratamientos médicos y la rehabilitación que necesita. Con esta invitación se podría presentar a la Fiscalía Militar una solicitud de autorización provisoria para salir del país. Todo esto sin perjuicio de seguir luchando por obtener su libertad definitiva.TESTIMONIO DE MARCELA RODRIGUEZ Me llamo MARCELA IRENE RODRIGUEZ VALDIVIESO; nací el 3 de marzo de 1953. Soy la segunda de 3 hermanas, hija de Ricardo, jubilado, y de Pilar, dueña de casa. Vivimos en la población Villa Sur entre 1957 y 1994; cuando llegamos a la población ésta no estaba terminada aún; no teníamos electricidad y debíamos ir a buscar el agua en bidones a la población Las Lilas, a unas 5 cuadras de mi casa. Estudié la enseñanza básica en la Escuela Matte de la Población Dávila, que estaba a 10 cuadras de mi casa. Cursé el 7º y el 8º en el Instituto Comercial de Villa Sur y la enseñanza media en la Escuela Técnica Femenina Nº 3 que estaba en el Paradero 10 de la Gran Avenida. En 1967, ingresé junto con mi hermana a las Juventudes Comunistas, incentivadas por un grupo de amigos del barrio; realizábamos actividades sociales y más tarde trabajamos en la campaña de Salvador Allende. En abril de 1968 junto con mis hermanas ingresé a un conjunto folklörico del Centro Comunitario de Villa Sur, donde aprendí a tocar guitarra; hacíamos presentaciones de folklore de la zona central en distintas poblaciones del sector. De este conjunto surgió el Centro Cultural Villa Sur, donde funcionaban además grupos de teatro, talleres muralistas y de plástica. En 1971 se formó la Agrupación de Centros Juveniles, la que llegó a contar con 12 organizaciones de jóvenes. El 11 de septiembre de 1973 vino a poner un punto final a este desarrollo. En 1974 ingresé a estudiar Tecnología en Tejidos en la Universidad Técnica del Estado. Formaba parte del último grupo del preuniversitario para la juventud pobladora organizado por un grupo de estudiantes de la universidad. Fue para mí una experiencia contradictoria estudiar en una Universidad llena de jóvenes vitales, pero amordazados por el terror y el espanto. Debido a graves problemas familiares no pude terminar mis estudios y, posteriormente, la carrera fue cerrada por la dictadura y no pude terminar mis estudios. En 1976 contraje matrimonio con Carlos Silva, estudiante de arquitectura de la Universidad de Chile y nos fuimos a vivir con mi suegra a la Comuna de Quinta Normal. Tuve dos hijos que fallecieron al poco tiempo de nacer. En 1979 comencé a trabajar como secretaria de una oficina formada por 12 estudiantes de arquitectura, que combinaban el trabajo con los estudios. En la oficina de arquitectura todos se fueron titulando; yo dactilografiaba memorias y proyectos de título. La oficina se cerró en 1984; producto de la cesantía generalizada. Casi todos los titulados, incluyendo mi esposo, debieron trabajar en el POJH (Programa para jefes de hogar) en distintas comunas de Santiago. Nos fuimos, entonces, a Ecuador, pero el clima de ese país afectó mi salud y debimos regresar en agosto de 1985. Desde entonces continué trabajando con mi esposo como ayudante de arquitectura, dibujante técnico y secretaria a la vez. El 14 de noviembre de 1990 fui detenida con posterioridad al rescate de un joven preso político, Ariel Antonioletti, para el cual me habían pedido ayuda. Recibí un disparo en la espalda y recuperé el conocimiento en la Posta Central donde permanecí incomunicada y custodiada por una gran cantidad de Carabineros. Luego me trasladaron a la Penitenciaría, donde me encerraron en una pieza oscura de 2 x 3 metros, tapiando la ventana con una placa metálica. Me incomunicaron hasta el 27 de noviembre, fecha en que pude hablar con mi abogado y ver a mi familia. Pasé 2 meses en la enfermería de la Penitenciaría y mi situación física fue empeorando producto de la falta de atención adecuada. Finalmente y gracias a la solidaridad de muchas personas, me trasladaron a la Posta Central, aquejada de una septicemia generalizada. MARCELA RODRIGUEZ ANTECEDENTES Nombre Marcela Rodriguez Fecha de nacimiento 3 de marzo de 1953 Carnet de Identidad 5.972.371-5 Estado civil Casada Fecha de la lesión 14 de noviembre de 1990 Diagnóstico de base Paraplejia espástica nivel T3 Vejiga e intestino neurogénico Colostomía umbilical Dolor central en transición de sensibilidad y en extremidades inferiores escala 0-10 = 10 Síndrome depresivo severo RELACIÓN DE HOSPITALIZACIONES HOSPITALIZACIONES 1990 - 1998 Santiago - Chile 14-19 noviembre 1990 Hospital Sótero del Río. Traumatismo raquimedular, sección completa nivel T3 por impacto de bala, que produce una paraplejia espástica. 19 noviembre 1990 Hospital penitenciario. Tromboflebitis extremidad inferior izquierda; infección urinaria a repetición; escara sacra y en los talones. Altas temperaturas. 18 enero 1991 Posta Central, traslado de urgencia. Septicemia generalizada; aspecto intoxicado; febril (40º); taquicardia; hipotensión. 24 enero 1991 Hospital Barros Luco, Sección infecciosos. Operada de escara sacra; neumonía, trombosis venosa profunda. Junio 1991 Hospital Penitenciario. Infecciones urinarias a repetición, traslado de urgencia a la Posta Central por neumopatía aguda y pielonefritis aguda. 4 mayo 1992 Hospital Barros Luco, Sección cirugía. Escara sacra y operación de colostomía. Junio 1992 Hospital Barros Luco. Extirpación de tumor benigno mama derecha. Julio 1992 Hospital Barros Luco. Anemia aguda; infección urinaria. Mayo 1993 Hospital Barros Luco. Síndrome anémico agudo; síndrome depresivo severo. Noviembre 1993 Clínica Santiago. Operación escara profunda glúteo derecho. Octubre 93-Enero 94 Fundación Centro para discapacitados "Esperanza Nuestra". Tratamiento de rehabilitación. Noviembre 1994 Hospital Barros Luco, Sección urología. Infección urinaria resistente. Vejiga neurogénica. Intervención de derivación urinaria. Marzo 95-marzo 96 Hospital J.J. Aguirre, Sección Medicina Física y Rehabilitación. Reconstrucción tránsito intestinal. Evaluación vejiga neurogénica para retiro de Sonda Foley y lograr autocateterismo. Tratamiento espasticidad severa. Tratamiento de dolor central y miofacial. Tratamiento de síndrome depresivo. Cordostomía; mielotomía; laminostomía; hicteroctomía subtotal y enterocitoplastia. Julio 1996 Hospital J.J.Aguirre, Sección urología. Infección urinaria resistente. Se realiza plastía por continuar con incontinencia urinaria. Enero 1997 Hospital San Juan de Dios, Sección urología. Resección de fístula cistoplástica. Julio 1998 Hospital San Juan de Dios. Resección de fístula. Septiembre 1998 a la fecha Hospital Barros Luco, Sección Neurología y Neurocirugía. Operada de escara profunda glúteo izquierdo e injerto de piel. Síndrome anémico. Laminostomía para reducir espasticidad. Nota sobre Kinesioterapia: Marcela ha sido tratada de manera irregular; si bien ha sido atendida en el Hospital J.J. Aguirre, la falta de continuidad en el tratamiento hace que éste prácticamente no se ha hecho. La familia se encuentra en la imposibilidad económica de contratar un tratamiento particular. Santiago, 20 de noviembre de 1998COMUNICADO URGENTE A LAS ORGANIZACIONES INTERNACIONALES DE DERECHOS HUMANOS Estimados amigos: La Organización de Defensa Popular, ODEP, realiza actualmente una campaña de solidaridad por la libertad de los presos políticos chilenos que permanecen en cárceles de alta seguridad y, en particular, por María Cristina San Juan y Marcela Rodríguez, debido al grave estado de salud en que se encuentran. Como Organización que trabaja por la promoción y defensa de los Derechos humanos en Chile, nos resulta paradojal e incomprensible la ardorosa defensa que el gobierno chileno realiza en estos momentos en favor del ex dictador Augusto Pinochet U., aduciendo motivos humanitarios y argumentando que en nuestro país existirían condiciones jurídicas que garantizarían un juicio imparcial, lo que no es verdadero . Con la detención de Pinochet en Londres, se ha abierto un contexto internacional favorable para la difusión de las violaciones a los derechos humanos que se siguen cometiendo a Chile; por ello, los invitamos a solidarizar con nuestra campaña en favor de Marcela Rodríguez y de María Cristina San Juan. Un análisis de la situación de estas compañeras que en Chile la justicia no respeta el debido proceso, que los presos políticos están sometidos a dobles enjuiciamientos con leyes especiales que los privan de todos los beneficios y que están en abierta contradiccion con las normas del derecho penal internacional. Los tribunales militares tienen, además, amplias atribuciones para juzgar a civiles; lo que les permite mantener intactas las amplias prerrogativas del "poder militar". Diversas organizaciones y personalidades se están movilizando para obtener una invitación de una institución privada o pública en el extranjero que le permita a Marcela Rodríguez, aquejada de una paraplejia espástica complicada por un conjunto de secuelas, hacerse un tratamiento médico y de rehabilitación física y psicológica para mejorar su calidad de vida. Esta invitación le permitiría a su abogado presentar ante los tribunales militares que la juzgan, un permiso provisorio para salir del país a hacerse dicho tratamiento. En la eventualidad de conseguir dicha invitación, les agradeceríamos que nos informaran si ustedes estarían dispuestos a apoyar la petición del abogado de salida temporal del país para Marcela Rodríguez, escribiendo al presidente de la república, de la Corte Suprema y a la ministro de Justicia. En relación con María Cristina San Juan, ella está detenida desde hace 6 años. En virtud de un juicio que estuvo lleno de irregularidades, se la juzgó como cómplice y fue condenada a cadena perpetua como autora de secuestro, sólo como represalia por negarse a acogerse a la "delación compensada". Desde hace dos años y medio, María Cristina se encuentra en el Hospital de la Penitenciaría, debido a un cuadro depresivo provocado por un Lupus Sistémico Diseminado y la enfermedad de Takayasu, enfermedades progresivas terminales que padece desde hace 14 años. En fecha reciente, su abogado presentó a la Corte de Apelaciones una petición de rebaja de condena por razones humanitarias, para la cual les solicitamos un apoyo explícito mediante cartas dirigidas al presidente de la República, la Corte Suprema de Justicia y el ministerio de justicia. Sin embargo, esta es solo una de las primeras gestiones tendientes a obtener su libertad. La ODEP está abierta a aportar mayores antecedentes si ustedes lo solicitan. Les agradeceríamos comunicarse con nosotros con la mayor urgencia que el caso requiere. Suscriben la presente petición, entre otros: ODEP Comité de prisioneros políticos por la libertad de Marcela Rodríguez Colectivo de prisioneras políticas (SEAS-COF) Colectivo rodriguista en prisión (CAS) Comité por la libertad de los presos políticos, San Bernardo Agrupación por la libertad de los presos políticos Asamblea Nacional por los Derechos Humanos Senador Jorge Lavandero Andrés Aylwin, ex-diputado Movimiento por la Dignidad Nacional Confederación Multisindical Foro por la Democracia Comité de los 119 Las direcciones de gobierno a las cuales enviar fax: MINISTERIO DE JUSTICIA: TELEFONO FAX, 6964558 MINISTRA DE JUSTICIA: SOLEDAD ALVEAR SUB-SECRETARIO DE GOBIERNO: JOSE ANTONIO GOMEZ DIRECCIÓN: MORANDE 107 SANTIAGO-CHILE MINISTERIO DEL INTERIOR MINISTRO DEL INTERIOR: RAUL TRONCOSO SUBSECRETARIO:BELISARIO VELASCO DIRECCION:PALACIO DE LA MONEDA, SANTIAGO-CHILE TELEFONO FAX: 6990394 PALACIO DE LA MONEDA PRESIDENTE DE LA REPUBLICA: EDUARDO FREI RUIZ-TAGLE TELEFONO-FAX: 6966952 Santiago de Chile, enero 1999

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